¿Te gustaría aprender a tocar un instrumento musical, pero crees que no tienes tiempo, “talento” o dinero para hacerlo? Si es así, te tengo una buena noticia: aprender a tocar un instrumento musical tiene muchos beneficios cognitivos que pueden mejorar tu vida en varios aspectos. Además, existen opciones para todos los gustos, niveles y presupuestos. En esta ocasión vamos a revisar 10 beneficios cognitivos de aprender un instrumento musical y cómo puedes superar algunas objeciones comunes que normalmente nos impiden iniciar el estudio de un instrumento musical.
10 beneficios cognitivos de aprender un instrumento musical
- Mejora la memoria. Aprender a tocar un instrumento musical implica memorizar notas, ritmos, acordes, escalas, melodías y letras. Esto ejercita la memoria a corto y largo plazo, y ayuda a prevenir el deterioro cognitivo asociado al envejecimiento. Un estudio realizado con adultos mayores encontró que aquellos que tocaban un instrumento musical tenían una mejor memoria verbal y visual que los que no lo hacían 1.
- Aumenta la atención. Tocar un instrumento musical requiere concentrarse en varios aspectos al mismo tiempo, como el sonido, la postura, la respiración, el movimiento y la coordinación. Esto mejora la capacidad de atención selectiva y sostenida, y reduce la distracción. Un estudio realizado con niños encontró que aquellos que recibían clases de música tenían una mayor capacidad de atención y una menor impulsividad que los que no las recibían2
- Desarrolla el razonamiento espacial. El razonamiento espacial es la habilidad de percibir y manipular objetos en el espacio. Tocar un instrumento musical implica reconocer y producir patrones sonoros que tienen una relación espacial con el instrumento y con el pentagrama. Esto mejora la capacidad de resolver problemas espaciales, como los que se presentan en las matemáticas, la física o la arquitectura. Un estudio realizado con niños encontró que aquellos que recibían clases de música tenían un mayor desarrollo del razonamiento espacial que los que no las recibían3.
- Estimula la creatividad. La creatividad es la habilidad de generar ideas originales y novedosas. Tocar un instrumento musical implica explorar diferentes posibilidades sonoras, crear e improvisar melodías y armonías, y expresar emociones e ideas a través del sonido. Esto estimula el pensamiento divergente, la imaginación y la innovación. Un estudio realizado con adultos encontró que aquellos que tocaban un instrumento musical tenían una mayor creatividad verbal y no verbal que los que no lo hacían4.
- Refuerza el lenguaje. El lenguaje es el sistema de comunicación verbal y escrito que usamos los humanos. Tocar un instrumento musical implica procesar información sonora compleja, discriminar sonidos similares, reconocer patrones y estructuras, y aprender un nuevo vocabulario y una nueva notación. Esto refuerza las habilidades lingüísticas, como la comprensión, la producción, la lectura y la escritura. Un estudio realizado con niños encontró que aquellos que recibían clases de música tenían una mayor habilidad para procesar el lenguaje hablado que los que no las recibían5.
- Potencia el aprendizaje. El aprendizaje es el proceso de adquirir nuevos conocimientos o habilidades a través de la experiencia o el estudio. Tocar un instrumento musical implica poner en práctica lo aprendido, recibir retroalimentación inmediata, corregir errores, repetir ejercicios y evaluar el progreso. Esto potencia el aprendizaje autónomo, el autocontrol, la autoestima y la motivación. Un estudio realizado con estudiantes universitarios encontró que aquellos que tocaban un instrumento musical tenían un mejor rendimiento académico que los que no lo hacían6.
- Mejora la inteligencia emocional. La inteligencia emocional es la habilidad de reconocer, comprender y regular las propias emociones y las de los demás. Tocar un instrumento musical implica expresar sentimientos a través del sonido, interpretar las emociones transmitidas por la música, compartir experiencias musicales con otros y adaptarse a diferentes contextos y situaciones. Esto mejora la empatía, la comunicación, la colaboración y el liderazgo. Un estudio realizado con adolescentes encontró que aquellos que tocaban un instrumento musical tenían una mayor inteligencia emocional que los que no lo hacían7.
- Aumenta la plasticidad cerebral. La plasticidad cerebral es la capacidad del cerebro de modificar su estructura y funcionamiento en respuesta a la experiencia. Tocar un instrumento musical implica activar y coordinar varias áreas cerebrales, como las auditivas, las visuales, las motoras, las ejecutivas y las emocionales. Esto aumenta la plasticidad cerebral, lo que se traduce en una mayor eficiencia y flexibilidad cognitiva. Un estudio realizado con músicos profesionales encontró que aquellos que habían empezado a tocar un instrumento musical antes de los 7 años tenían una mayor plasticidad cerebral que los que habían empezado después.8
- Reduce el estrés y la ansiedad. El estrés y la ansiedad son estados emocionales negativos que se producen ante situaciones percibidas como amenazantes o desafiantes. Tocar un instrumento musical implica relajar el cuerpo y la mente, respirar profundamente, liberar tensiones, distraerse de los problemas y enfocarse y disfrutar del momento presente. Esto reduce el estrés y la ansiedad, y mejora el bienestar psicológico. Un estudio realizado con adultos encontró que aquellos que tocaban un instrumento musical tenían menores niveles de estrés y ansiedad que los que no lo hacían. 9.
- Previene la depresión. La depresión es un trastorno mental caracterizado por un estado de ánimo bajo, una pérdida de interés por las actividades placenteras, una baja autoestima y una falta de energía. Tocar un instrumento musical implica generar endorfinas, las hormonas de la felicidad, elevar el ánimo, aumentar el interés por la música, mejorar la autoestima y recuperar la energía. Esto previene la depresión, o ayuda a superarla si ya se padece. Un estudio realizado con adultos mayores encontró que aquellos que tocaban un instrumento musical tenían menores síntomas depresivos que los que no lo hacían. 10
Cómo superar algunas objeciones comunes que nos impiden aprender un instrumento musical
Ahora que ya conoces los beneficios cognitivos de aprender un instrumento musical, quizás te estés preguntando cómo puedes empezar a hacerlo. Tal vez tengas algunas objeciones o excusas que te impidan dar el primer paso. Aquí te presento algunas de las más comunes y cómo puedes superarlas.
- No tengo tiempo. Esta es una de las objeciones más frecuentes, pero también una de las más fáciles de resolver. No necesitas dedicar horas al día para aprender a tocar un instrumento musical. Con unos 15 o 20 minutos diarios de práctica constante puedes lograr avances significativos. Lo importante es que seas organizado, establezcas una rutina y aproveches al máximo el tiempo disponible. Puedes practicar por la mañana, antes de ir al trabajo o al estudio, o por la noche, antes de ir a dormir. También puedes aprovechar los fines de semana o los días festivos para dedicarle más tiempo a tu instrumento. La idea de que se necesitan 8 horas diarias es errónea
- No tengo talento. Esta es otra objeción muy común, pero también muy equivocada. El talento no es algo innato o fijo, sino algo que se puede desarrollar con la práctica y el esfuerzo. La mayoría de los músicos famosos no nacieron con un don especial, sino que lo fueron adquiriendo con años de dedicación y pasión por la música. Además, no necesitas ser un virtuoso para disfrutar de tocar un instrumento musical. Con aprender lo básico ya puedes tocar canciones y piezas sencillas, y sentirte satisfecho con tu progreso.
- No tengo dinero. Esta es otra objeción muy habitual, pero también muy solucionable. No necesitas gastar una fortuna para aprender a tocar un instrumento musical. Existen opciones para todos los bolsillos y gustos. Puedes comprar un instrumento usado o de segunda mano, alquilarlo o pedirlo prestado. También puedes optar por instrumentos más económicos o trabajar tu voz, con lo cual estarás utilizando tu cuerpo como instrumento.
- No tengo profesor. Esta es otra objeción muy frecuente, pero también muy superable. No necesitas tener un profesor presencial para aprender a tocar un instrumento musical. Existen muchas alternativas online que te pueden ayudar a aprender de forma autodidacta ademásde tener retroalimentaciones, como cursos, tutoriales, vídeos, aplicaciones, etc. Solo necesitas una conexión a internet y un dispositivo electrónico. Puedes acceder a estos recursos cuando quieras y desde donde quieras, y avanzar a tu propio ritmo y nivel. Además, puedes interactuar con otros estudiantes o profesores a través de foros, chats, videollamadas, etc.
- No tengo motivación. Esta es la última objeción que te voy a presentar, pero también la más importante. La motivación es el motor que te impulsa a hacer algo que te gusta o te interesa. Sin motivación, es difícil mantener el hábito de tocar un instrumento musical y disfrutar del proceso. Para aumentar tu motivación, te recomiendo que elijas un instrumento que te guste, que toques música que te apasione, que te pongas metas realistas y alcanzables, que celebres tus logros y que compartas tu experiencia con otros. También puedes buscar inspiración en otros músicos que admires o que hayan superado dificultades similares a las tuyas.
Conclusión
Aprender a tocar un instrumento musical es una de las mejores decisiones que puedes tomar para mejorar tu salud mental y tu capacidad cognitiva. No solo te divertirás y te relajarás, sino que también desarrollarás habilidades como la memoria, la atención, el razonamiento, la creatividad, el lenguaje, el aprendizaje, la inteligencia emocional, la plasticidad cerebral y la prevención de trastornos mentales. Además, no tienes que dejar que las objeciones o excusas te impidan empezar a hacerlo. Existen soluciones para todos los problemas que puedas tener, como el tiempo, el talento, el dinero, el profesor o la motivación. Solo necesitas tener ganas de aprender y disfrutar de la música.
Espero que este artículo te haya resultado interesante e informativo. Si tienes alguna pregunta o comentario sobre el tema, no dudes en dejarlo abajo. Y si te ha gustado el artículo, compártelo con tus amigos o familiares que también quieran acercarse a la música. ¡Hasta la próxima!