Bohemia, región histórica que hoy forma parte de la actual República Checa, tierra nativa de nuestro compositor de la obra de la semana, Bedřich Smetana. Al hablar de Bohemia no podemos mas que imaginarnos los paisajes y los escenarios que ofrecen sus campiñas y ciudades más célebres, especialmente su capital Praga y el río que cruza la ciudad y que es parte de su encanto, el Moldava.
Smetana es considerado el padre de la música checa. Su música representa la identidad del país y sus obras más importantes son prueba de ello. Su ópera La Novia Vendida y su ciclo de poemas sinfónicos Mi Tierra son ejemplos de la ilustración y la proyección de la región bohemia al mundo.
Hablemos de Má Vlast, Mi Tierra, ciclo de seis poemas sinfónicos que representan lo que a apreciación del compositor, lo más importante de los sitios, leyendas y folclor de Bohemia. Un poema sinfónico es una pieza escrita generalmente para orquesta, que ilustra con música algo en específico: un lugar, una historia, una circunstancia. Un poema sinfónico es el mejor ejemplo de lo que la música programática es: el compositor narra la historia a través de temas que pueden representar los elementos más importantes de una historia. La audición de un poema sinfónico se disfruta más cuando se tiene el contexto de su historia.
Por eso es el valor que tienen los seis poemas sinfónicos que componen Mi Tierra. Brevemente describimos cada uno de ellos y nos detendremos en el segundo poema que es nuestra obra de la semana:
- Vyšehrad, El Alto Castillo. Describe un castillo a orillas del Moldava, en Praga. Haciendo una corta aclaración, no se trata del famoso castillo de Praga.
- Vlatava, El Moldava, nuestra obra de la semana. El río más importante de la República Checa. Haciendo una corta aclaración, no se trata del famoso castillo de Praga.
- Šárka, que cuenta la leyenda de la guerrera amazona del mismo nombre.
- Z českých luhů a hájů, De los bosques y prados de Bohemia. Descripción de las zonas boscosas de la región.
- Tábor, que describe el espíritu guerrero de la ciudad de Tábor, fundada por los husitas.
- Blaník, el último poema, que representa a la montaña con ese nombre en donde según la leyenda, en el interior duerme un ejército entero esperando despertar para defender a su patria en sus horas más oscuras..
El ciclo fue compuesto en un lapso de 5 años, entre 1874 y 1879. Para entonces, Smetana se había quedado sordo con 50 años de edad. Es un período de su vida en donde después de haber trabajado en Suecia, regresaba a Praga y sus alrededores para cuidar su salud y dedicarse de lleno a la composición. Moriría en una institución para enfermos mentales en 1884.
Hablemos ahora si del Moldava, Vlatava en checo. El mismo compositor nos cuenta cómo narra, a través de una de sus obras más famosas, el curso de uno de los ríos más fotografiados del mundo:
“La composición describe el curso del Moldava, a partir de sus dos primeras corrientes, el Moldava frío y el cálido, la unión de las dos corrientes en una sola corriente; luego el fluir del Moldava en bosques y prados, a través de paisajes donde se celebra una alegre boda; la danza de las sirenas a la luz de la luna; pasa por palacios, castillos y ruinas se alzan con orgullo en las rocas cercanas. El Moldava se arremolina en los rápidos de San Juan; fluye en una amplia corriente hacia Praga. Pasa por Vyšehrad, desapareciendo finalmente en la distancia, majestuoso, terminando en el Elba.”
Así como lo describe el compositor suena el Moldava, por lo que vale la pena poner atención en la audición para escuchar el nacimiento del río, cómo se junta en una sola corriente y pasa por bellísimos paisajes. Cómo podemos ser partícipes de una boda y también entrar en el mundo de la fantasía para escuchar y ver a las sirenas bailar. Aventurarnos en los salvajes rápidos y nuevamente, abrirnos hacia la impresionante Praga, pasar por su histórico castillo y dirigirse al Elba para así terminar su curso. Todo está en la pieza musical y se ve, gracias a la magia de la audición.
Espero que escuchar el Moldava te anime, estimado lector, a seguir con la audición del resto de los poemas sinfónicos que hacen esta bella obra, Mi Tierra.
